En un clima de recogimiento y fraternidad, el personal docente, administrativo y de servicios generales de la Unidad Educativa Católica “La Victoria” vivió una convivencia especial por Semana Santa, el pasado miércoles 16 de abril, en la Casa de las Hermanas Misioneras Franciscanas de Santa Clara, ubicada en Yahuarcocha.
Bajo el lema “Conversión y Silencio”, más de 35 personas participaron en una jornada que permitió detener el ritmo habitual para volver la mirada al interior, acompañados por misioneros y misioneras identes, quienes guiaron reflexiones profundas e inspiradoras.
UN ESPACIO PARA DETENERSE Y VOLVER A DIOS
La jornada estuvo marcada por momentos de oración, escucha del Evangelio y trabajo en pequeñas comunidades. Para muchos, fue la primera vez que vivían una experiencia así: “Me gustó mucho, es la primera vez que asisto. Siempre se aprende algo, sobre todo cuando uno analiza cómo está su relación con Dios.”
Otro participante expresó: “Lo que compartimos en las comunidades fue muy enriquecedor. Agradezco a quienes, con sencillez y claridad, nos ayudaron a reflexionar sobre cómo ser mejores personas, mejores cristianos.”
SILENCIO, ORACIÓN Y CONVERSIÓN
Los participantes destacaron el valor de la oración constante como motor de la vida espiritual, y el silencio como espacio fecundo donde Dios habla. Uno resumió así su experiencia: “Fue un momento de reflexión donde nuestro ejemplo a seguir es Jesús.”
Este encuentro, vivido en pleno tiempo litúrgico de la Semana Santa, no solo ofreció un descanso al cuerpo, sino alimento al espíritu. Como dijo uno de los presentes: “El Evangelio, compartido y vivido, es el primer y mejor alimento para el alma.”
