El domingo 7 de julio, los Misioneros identes de París tuvieron la alegría de celebrar el 60º aniversario de su fundación, acompañados por la Familia idente.
Aunque lo celebramos con una semana de retraso, y como señaló nuestro hermano Paul Alexandre en su homilía, el Evangelio de este domingo llegó en el momento oportuno para recordarnos que Cristo hace de todos los bautizados misioneros enviados “entre los lobos”, en medio de las dificultades, pero recibiendo la gracia de mantener la paz y de anunciar a todos, sin aceptación de personas ni de culturas, que son hijos e hijas amados de nuestro Padre celestial. El evangelio de este domingo renovó nuestra conciencia de que somos enviados: “¡Id! He aquí yo os envío.” De este imperativo, “¡Id!”, recibimos nuestro nombre, idente.
El día continuó con un cálido y amistoso buffet en el jardín parroquial y la lectura por parte de la Superiora Provincial de la lección de nuestro Presidente con motivo de este 60º aniversario. Su profunda reflexión sobre la escucha de la Palabra de Dios y sobre la vida de San Pedro y San Pablo fue una fuente de consuelo y de paz para todos.
