La preparación de la Semana Santa se ha vivido de un modo especial en la parroquia del Buen Pastor de Puerto Real (Cádiz), dado que los niños y adolescentes han tenido el protagonismo. Una de las liturgias más bellas fue la celebrada el 22 de marzo en la que los niños de catequesis de esta parroquia, encomendada a los misioneros y misioneras identes, salieron por las calles de la barriada (Barrio Jarana) para hacer un Vía Crucis. Iban acompañados de sus familias, los catequistas, los jóvenes de esta Parroquia que se preparan para recibir el sacramento de la Confirmación, algunos feligreses, y presidía el Vicario Parroquial nuestro hermano Alfonso María.
Los niños se turnaron para llevar la Cruz y para mostrar a cada lado de la cruz el dibujo de la estación correspondiente que ellos mismos en catequesis anteriores habían coloreado, así como el nombre de la Estación.
La lectura de la meditación propia de cada una de ellas estuvo a cargo de los niños que este año hacen la Primera comunión, ayudados en la megafonía por los jóvenes. Durante el recorrido, entre estación y estación, iban cantando las canciones también preparadas en la catequesis de la semana anterior.
Previa a la salida, los jóvenes de confirmación y varios catequistas habían señalado los lugares donde iba a rezarse cada una de las estaciones.
Providencialmente, el día del Vía Crucis fue el único que hizo buen tiempo para salir a la calle. Con este acto de confesión de nuestra fe se reanudó una tradición interrumpida desde hacía bastantes años. Fue una novedad que estuviera principalmente a cargo de los niños. La asistencia fue de unas 70 u 80 personas.
Fue muy edificante contemplar la atención de los niños al contenido de las estaciones, durante todo el tiempo que duró la liturgia, descubriendo con más profundidad los diversos momentos de la pasión de Cristo. Todo lo vivido, ayudado por las meditaciones y los cantos, ha significado para muchos una experiencia única y, seguramente, inolvidable.
