La visita de nuestro hermano Luis, Superior general de los misioneros identes, a Camerún ha tenido signos de alegría, paz y muchas bendiciones. En la parroquia de San Pedro y San Pablo de Soa, en Yaoundé se realizaron dos retiros espirituales (Motus Christi). Los estudiantes y los feligreses de la parroquia estaban llenos de entusiasmo por participar en el retiro, porque para algunos era la primera vez que asistían a un Motus Christi.
El primer Motus Christi tuvo lugar el 6 de diciembre de 2019. Tuvimos dos conferencias, la primera dada por el Superior General, el P. Luis Casasús, y la segunda por nuestra hermana Anne, Superiora Provincial de las misioneras.
El P. Luis habló sobre la fe. Empezó diciendo que nuestra fe tiene muchos otros elementos además del credo, que son personales. Nuestra fe es única y personal. Dijo que a veces Dios nos da una fe profunda a través de acontecimientos trágicos, si permanecemos abiertos a su gracia, sin permitir que el sufrimiento y el dolor nos impidan ver lo que Dios quiere mostrarnos.
También dijo que no necesitamos milagros extraordinarios – como lo hizo con la gente de su tiempo – para tener fe, porque tenemos las vidas de los santos y nuestras vidas personales, donde vemos lo que la fe puede provocar en nuestras vidas y en las vidas de las personas que nos rodean. Nos interpeló a mirar, en el silencio de la oración, a las personas, a las situaciones que nuestro Padre ha puesto en nuestras manos y de las que nos debemos ocupar, además de estar agradecidos, etc.
La conferencia de nuestra hermana Anne se inspiró en la Exhortación Apostólica post-sinodal del Papa Francisco, “Christus Vivit”, para transmitirnos el entusiasmo, la compañía y el ejemplo de jóvenes santos, como el Hermano Thierry, un joven carmelita camerunés en proceso de beatificación.
En el momento del toque carismático hubo hermosos testimonios, especialmente sobre cómo la presencia de los misioneros identes ha enriquecido la vida espiritual de estos jóvenes y cómo la parroquia de San Pedro y San Pablo es un hogar para la mayoría de ellos. Durante el toque carismático, una estudiante que asistía al Motus Christi por primera vez, rompió en lágrimas porque estaba viviendo esta hermosa experiencia por primera vez y se sentía realmente como en una familia. También agradeció a su amiga que la hubiera invitado.
Otro estudiante, al ver a la joven tan conmovida, expresó su dolor por no haber invitado a nadie, aunque él también podría haber hecho experimentar a alguien más la inmensa alegría de Dios, invitándola a este retiro.
El segundo Motus Christi tuvo lugar el 11 de diciembre de 2019. El P. Luis habló sobre la vocación. Empezó diciendo que participamos en retiros para recordarnos a nosotros mismos que Dios nos está llamando para algo nuevo, específico y personal. Dios nos consuela con una misión. Caminamos juntos, pero nos da diferentes misiones. El Padre Luis habló de la vocación como la misión que Dios nos confía a cada uno de nosotros. Nos pidió que nos dediquemos a lo largo del día a entender lo que Dios quiere decirnos ante las diferentes situaciones.